Vientos de guerra termonuclear; México tan lejos pero tan cerca de Ucrania

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Aún se percibe, como un débil eco, que se ahoga en el tiempo, las palabras del entonces precandidato presidencial Enrique Peña Nieto, en donde enfatizaba, que la Constitución era el programa, ante las presiones imperiales reformistas; ¿Qué fue lo que paso?

Al final de la década de los 1980’s, se derrumbó el bloque soviético y el imperio anglo- holandés-americano, se fue al asalto de los países de Europa del Este; el individuo que fue elegido, por el imperio, para coordinar dicho plan, fue Jaques Attali, hombre cercano al Banco sinarquista francés Lazard Freres y biógrafo oficial de la familia oligarca británica Warburg. Gracias al trabajo de Jaques Attali, a través del Banco de Reconstrucción, la oligarquía anglo holandesa pudo apropiarse de un porcentaje muy considerable de los bienes estratégicos de esas naciones, es ahí, cuando surgen los llamados oligarcas rusos, que no es otra cosa, que testaferros del imperio invasor; el objetivo final, era acabar con Rusia, una vez eliminadas naciones como Ucrania, estrechos aliados.

Es precisamente, al final de la década de los ochentas del siglo pasado, cuando en México, es impuesto Carlos Salinas de Gortari y es cuando él imperio anglo holandés, envía a Joseph Marie Córdoba Montoya, individuo cercano al mismo Jaques Attali, con la misma encomienda: coordinar el asalto a México. Desde ese golpe, México ha estado dominado, por estos mismos intereses imperiales, hasta la fecha.

Ahora Ucrania rechaza, el plan genocida de austeridad exigido por la Unión Europea y decide aliarse a Rusia y eventualmente a China, en una acción de sobrevivencia. Esta decisión soberana Ucraniana, fue inaceptable para el Imperio Anglo Holandés, que prefiere desatar el infierno nuclear sobre la tierra, antes que aceptar decisiones soberanas de sobrevivencia.

El Estadista Norteamericano Lyndon LaRouche, exige la salida de Barack Obama de la Presidencia de los Estados Unidos, por ser un elemento utilizable clave, en los planes imperiales de guerra termonuclear.

El Presidente Vladimir Putin y la actual elite rusa, se formaron enfrentando la ofensiva imperial occidental y sus intenciones de desintegrar a la misma Rusia; hoy que el sistema financiero especulativo global, tiene contados sus días, el gobierno ruso está decidido a defender, así sea, en un enfrentamiento nuclear, su soberanía y no va a permitir que Ucrania, su antigua aliada, sea convertida en un polvorín caótico, como lo alienta, ahora mismo, el Congreso Norteamericano, con su apoyo a la oposición ucraniana constituida por redes abiertamente nazi fascistas.

No es de dudar, que estas mismas fuerzas imperiales fueron las que consumaron en México, un golpe en la pasada campaña presidencial; no iban a permitir que se ejerciera un rasgo de soberanía nacional, en medio del colapso del sistema financiero global.

El pueblo mexicano, debe de expresar, su solidaridad con el pueblo ucraniano, a elegir libremente la vida y rechazar la muerte, como lo dijo correctamente, la ex candidata ucraniana presidencial Natalia Vitrenko.

El pueblo mexicano debe rechazar cualquier contemporización del Gobierno Mexicano con los planes imperiales de guerra y exigir respeto a la soberanía de Ucrania.