El Estado ha domesticado al artista mexicano: Óscar Tanat

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Por Rodrigo Islas Brito

“El artista tiende a una necesidad de reconocimiento y como ese reconocimiento lo da el Estado, y como ese reconocimiento implica dinero y beca, y como el dinero implica poder y la posibilidad de seguir creando. Entonces se cae en un círculo vicioso que no se rompe nunca. ¿Cómo te sales de eso?”.

Se pregunta el poeta y escritor Óscar Tanat al tiempo de hablar de su nuevo libro de poesía Basuras cuidadosamente escogidas.

El poeta mira hoy y desde hace décadas un proceso de “domesticación del artista por parte de las instituciones del estado”.

“La institucionalización de la poesía, no sé cuántos poetas escriban hoy poemarios que no sean  para ganar una beca o agradar a ciertos personajes mandones de la burocracia gubernamental del arte”.

“Ya hay muy pocos hoy que  en verdad aspiran a publicar de manera independiente viendo a la poesía no como el fin sino como el medio”.

“Por la situación económica todos los artistas caemos en la trampa de la institución, al no tener mecanismos de supervivencia no queda más remedio que acudir a lo institucional, y lo institucional lo queramos o no dicta reglas sobre lo que debe publicarse y como se debe de decir”.

Tanat argumenta que sería incongruente de su parte mandar su nuevo  libro a una convocatoria del estado y después decir: “miren que cabrón soy, me chingo al estado con dinero del mismo estado. Mucha banda becada o aspirante ha, dice y repite eso, estoy contra el estado desde el interior del estado. No, eso es engañarse, si el dinero te lo está dando el estado, entonces eres parte de el”.

Oscar no niega que ha escrito cosas para ganarse una beca del FONCA que afortunadamente nunca le dieron, y asegura que hoy más que nunca los poetas deben asumir una responsabilidad lingüística social.

“Los sistemas económicos de poder joden al pueblo y lo están pandemizando con su propia corrupción. Que los poetas sean hoy los que generen un contradiscurso. Que la poesía logre dar este putazo en la cabeza de la gente”.

“Triste verga cabizbaja que deprimida toda andas” dice un poema de un poeta que afirma no interesarle llegar al intelectual, ni hacer un análisis del país que nadie lea.

“Decirle al lector oye la estas cagando, hagamos la revolución, es menos efectivo que verdaderamente buscar tocarle los huevos a la gente”.

Tanat observa a las redes sociales como “el método que menos miedo da para protestar, porque estás en tu casa y estas manifestando tu rencor”.

“Si toda la gente que protesta en las redes se juntaran para salir a la calle y armara un verdadero desmadre, seguramente habría un montón de sangre y tendríamos de la perder porque no tenemos al ejército y lo que si tenemos es a un narcoestado en nuestra contra”.

“Por eso todo el mundo se encierra en redes sociales a escribir su rencor, no hay opción”.

El poeta establece que el lenguaje también es una guerra (“hasta Peña Nieto tiene a alguien que  escribe sus discursos”) en la cual hay que buscar la provocación.

“Seguramente se están haciendo muchas cosas, pero hasta donde mis ojos han alcanzado a ver la poesía ha evadido su responsabilidad con este momento especifico, trágico, funesto y depresivo del país”

“Hoy, la mayoría de la poesía se ha vuelto un arma de adorno del propio poeta, un mecanismo de institucionalización gubernamental. Y como no iba a ser así si el único reconocimiento poético que existe en  México es el del Estado, cuando precisamente contra lo que deberíamos de estar luchando es contra el mismo estado”.

Para Tanat la palabra clave aquí es incongruencia. Confiesa que apoyaba hace unos tres o cuatro años el precepto de que la poesía debía ser un mecanismo de escape, de fantasía, de poder evadir un poco la realidad.

“Pero de eso ya me harté, todo lo que está pasando en el país, corrupción, feminicidios, desapariciones forzadas, el cinismo puerco. Todo es un ¡ya basta!, donde hoy hay que gritar, regañar, prender, incitar”.

Frente a toda la porquería que hoy está sucediendo no solo en México sino en el mundo, el poeta recuerda un verso  de su autoría: “Quiero ser gobernador y chuparme las nostalgias”, y hablar “sobre el arte de ser unos pendejos, pendejos declarados y pasear por la ciudad sin pena alguna”.

La ironía es para el entrevistado un motor necesario y voraz, donde recuerda que hoy el ir a las pirámides de Egipto, frente a un escenario de terrorismo fundamentalista extremo, puede salir más barato que llegar a Tijuana.

El artista habla de La bande-son imaginaire, su banda darks que hoy ha lanzado un primer disco  de siete rolas y un videoclip, Cabaret.

Conformada por su hermano Ángel Tanat y  el Violinista Oscuro, Tanat define su darks como “un dark social”.

“Hoy la realidad de este país es más terrorífica que cualquier cosa que me pudo haber hecho soñar el vampirismo a los 18 años, y eso es lo que queda por expresar en una banda oscura”

Del video Cabaret, el entrevistado destaca su temática que aglutina actualidades mexicanas como: “feminicidios, tráfico de influencias, manipulación para gente proclive a dejarse ser títeres  y el uso de la mujer como objeto incluso después de muerta”.

Tanat asegura que la de hoy en México no es una sociedad idiotizada, sino “una sociedad conquistada, sobajada y con una particular capacidad para el denigre hacía lo propio”.

“Cuando esta oscuridad social  se va hacia el menos uno, menos dos o menos diez, es cuando ya estás en una sociedad que ha asimilado esta oscuridad como la absoluta normalidad de la vida cotidiana”.

“¿Mataron a fulano?, ya no te sorprende, ¿Qué la hija del vecino desapareció y la encontraron muerta? Caray, que mal pedo, pero hasta ahí llega tu comentario. La oscuridad se vuelve irreversible e irreflexiva”.

Tanta verdad sin embargo no priva a Óscar Tanat de seguir intentándola en un mundo al que quiere señalar, junto con su esposa Celine Demol ha levantado hace unos meses a unos paso de la plaza el Pañuelito, La Braderia.

Librería que anuncia  traer libros, rarezas y chingonerias, y de la cual el poeta resume su motivación.

“Es un intento más para seguir viviendo”.