Por Excelsior
El 60 por ciento del territorio nacional presenta condiciones que favorecen las enfermedades transmitidas por vectores, entre ellas el zika, por lo que más de 50 millones de personas se encuentran en riesgo de contraer dichos males.
De acuerdo con el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) de la Secretaría de Salud, más de 50 millones de personas que habitan estos territorios son potencialmente susceptibles a los padecimientos transmitidos por vector, tales como dengue, chikungunya y ahora zika, lo que representa ya un problema de salud pública.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), señala que los vectores son animales que transmiten patógenos, entre ellos parásitos, de una persona (o animal) infectada y ocasionan enfermedades graves en el ser humano. Estas enfermedades son más frecuentes en zonas tropicales, subtropicales y en lugares con problemas de acceso al agua potable o al saneamiento.
La mayoría de éstos se localizan en centros agrícolas, ganaderos, industriales, pesqueros, petroleros y turísticos de gran relevancia para el país.
El Aedes Aegipty, vector responsable de transmisión de dengue, chikungunya y zika, se encuentra prácticamente en todo el país salvo en la Ciudad de México y Tlaxcala.
Ante ello, las autoridades sanitarias han insistido en la necesidad de controlar al vector, pues sin éste no habría transmisión de dichas enfermedades.
En este contexto, para el control específico del mosquito Aedes Aegypti, el Cenaprece destaca que un elemento importante ha sido contar con información respecto al riesgo mediante la instalación y lectura semanal de trampas de ovipostura.
Las llamadas ovitrampas son justo trampas usadas para el proceso de vigilancia dell Aedes Aegypti, basado en la necesidad biológica de las hembras para procurar el agua para colocar sus huevos, ya que el simple uso de insecticidas no es suficiente, dado que los mosquitos han generado resistencia.
Según el Cenaprece, los insecticidas empleados desde 1996 hasta 2007 otorgaron resistencia al vector Aedes Aegypti por su uso prolongado y redujeron su efectividad en las áreas de mayor endemicidad.
De ahí que la instalación de ovitrampas se convirtiera en un mecanismo clave para el control del vector, ya que, en 2012, por ejemplo, se mantuvieron activas 105 mil 561 ovitrampas en el país.
Para el Cenaprece el método de observación de la distribución, abundancia y variación estacional del vector mediante ovitrampas, permite detectar semanalmente los sitios con riesgo, los cuales se intervienen con acciones integrales de control del vector, identificando además aquellas áreas en las grandes ciudades donde el vector no está presente o su densidad es baja.
De este modo, se vuelve factible estratificar el riesgo y la intensidad de las acciones, dirigiéndolas hacia áreas prioritarias, lo que permite hacer más eficiente y efectiva la aplicación de recursos
En el caso del vector Aedes Aegypti la Secretaría de Salud ha identificado 168 comunidades prioritarias.
Además, agrega Cenaprece, las ovitrampas proveen de material biológico local para llevar a cabo estudios de resistencia del vector a los insecticidas.
Medidas de prevención
- La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un programa de salud mundial que dé la mayor prioridad al control de los vectores a partir de procesos sencillos y no costosos.
- El uso de mosquiteros tratados con insecticidas ayudará a mantener alejado al vector desde las superficies en donde difícilmente pueden ser detectados.
- La fumigación periódica en interiores impedirá que la presencia de mosquitos se prolongue y destruir sus huevecillos.
- Procure tapar todos los recipientes con agua, específicamente los residuales, ya que éstos atraen más a los mosquitos.
