Tras la reapertura de las oficinas gubernamentales en el estado de Texas, se espera que en las próximas horas esté listo el certificado de defunción, para que pueda realizarse la inmediata repatriación del cuerpo del morelense Édgar Tamayo Arias, ejecutado el 22 de enero por el homicidio del policía Guy Gaddis.
Al cumplirse ocho días de la ejecución, las autoridades consulares de México en Houston, informaron que tras las heladas que azotan el sur de los Estados Unidos, fueron reabiertas las oficinas gubernamentales y la previsión es que en poco tiempo el médico forense, esté en condiciones de firmar el certificado de muerte de Édgar, cuyo documento ha detenido el traslado del cuerpo del morelense.
En entrevista telefónica el Cónsul General de México en la ciudad de Houston, Luis Malpica y Lamadrid, señaló que se realizan las gestiones para que a la brevedad posible el médico que declaró la muerte de Édgar Tamayo Arias, firme el acta.
Nosotros hemos estado insistiendo para que la firme el doctor correspondiente, la respuesta ha sido que el doctor tiene hasta 10 días hábiles para firmarla; entonces nosotros ya tenemos contratada la funeraria que va a hacer el traslado de los restos allá a México, esperamos que si todo va bien mañana mismo se cumpla con el trámite correspondiente”, explicó.
Bajo esta circunstancia, se estima que los trámites burocráticos pudieran concluir en las próximas horas para que en breve el cuerpo sea trasladado a México y entregado a la familia en el municipio de Miacatlán, donde los pobladores esperan el arribo de los restos de Edgar para el cortejo fúnebre y su sepultura en el panteón local, donde se tiene ya listo el sitio de inhumación.
Por su parte, la secretaría de Desarrollo Social en Morelos, Adriana Díaz Contreras, quien se ha mantenido al pendiente de esta información, detalló que está en espera de que mañana a más tardar le envíen el itinerario del traslado del cadáver de Édgar.
En Miacatlán los vecinos se han organizado con el Ayuntamiento, para que al momento de llegar el cadáver lo reciban en la entrada del pueblo, donde hay una manta fijada en un espectacular, la cual está elaborada en los colores de la bandera Norteamericana y dice ¡Edgar Tamayo, inocente!, y lo conduzcan a la casa de sus padres.
