La Jornada
Los nuevos representantes nacionales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) serán acotados en sus atribuciones. Dejarán de comprar medicamentos, salvo en casos específicos, no harán licitaciones para nuevas obras ni llevarán juicios que involucren compromiso de pago de más de 15 millones de pesos, afirmó el director del instituto, Zoé Robledo.
En conferencia de prensa, el funcionario habló sobre el avance en la selección de quienes a partir de enero serán titulares de los Órganos de Operación Administrativa Desconcentrada (Tooad) y sustituirán a los actuales delegados.
También informó que la reorganización administrativa del IMSS, propuesta a principios del año, ya ha sido desestimada por el Consejo Técnico, por lo que está en curso la actualización con base en criterios similares a los que se aplican para el cambio de delegados.
El proyecto elaborado durante la gestión de Germán Martínez Cázares –quien dejó el instituto en mayo pasado– planteaba la disminución de plazas de confianza en las delegaciones y las oficinas centrales, con lo que se buscaba cumplir la política de austeridad del gobierno.
Ayer, respecto del concurso para elegir a los Tooad, Robledo indicó que durante las dos semanas que la convocatoria estuvo abierta para el registro de candidatos, a partir del 2 de septiembre, la plataforma registró 2 mil 637 entradas, de las cuales 984 personas proporcionaron sus datos y entregaron los documentos solicitados.
De ellas, 194 cumplieron con los requisitos y 159 aspirantes se presentaron al examen de conocimientos el pasado sábado en las oficinas centrales del IMSS; 47 son mujeres y 112 hombres.
Robledo reiteró que el proceso de selección tiene la finalidad de terminar con la política de discrecionalidad en la cual los nombramientos eran decididos por el director. Con cada cambio de titular del IMSS se planteaba como objetivo terminar con la corrupción con nuevos delegados.
El cambio estructural en esta administración consiste en elegir a las personas con la mejor capacidad y experiencia mediante un concurso abierto y transparente.
Luego del examen, que se definió el mismo día de su aplicación ante notario público, en la siguiente etapa se harán entrevistas con un panel de tres especialistas: Alberto Lifshitz, Marta Soto y Fabiola Perlas.
Luego se llevará a cabo la selección de los 35 aspirantes, quienes participarán en la insaculación para definir la oficina que les tocará dirigir.
Robledo agregó que con este concurso se sientan las bases para el servicio profesional de carrera en el Seguro Social. Participa personal de enfermería, médicos activos y jubilados que acrediten una antigüedad mínima de 10 años en el instituto y cinco en algún puesto directivo. La mitad de los puestos serán ocupados por mujeres.
