Oaxaca en primeros lugares a nivel nacional por mortalidad materna, las mujeres no somos cifras: Activista de DDESER

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“Es indignante que este yendo en aumento el tema de los feminicidios en el Estado de Oaxaca, no es posible que las mujeres tengamos que preocuparnos por cómo nos vestimos, por cuándo y a donde salimos, a donde vamos, donde estamos y con quien.”

Mayra Morales Aldaz, coordinadora estatal de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos (DDESER) se refiere a Dulce Melisa Martínez Allende de 16 años de edad, alumna del Plantel 13 del Colegio de Bachilleres del Estado de Oaxaca (COBAO), asesinada hace unos días en Huautla de Jiménez.

“Es deber del estado garantizar nuestra seguridad y no lo está haciendo. El hecho de que mujeres estén siendo asesinadas con saña, de que haya mujeres que están viviendo violencia de cualquier tipo nos habla de una descomposición social bastante fuerte.”

Aldaz asegura que, este es un nuevo llamado para que las instituciones, el gobernador y la legislatura actúen verdaderamente en el tema del feminicidio, ya que no es posible que este se siga dando y que se tome como si no pasara nada.

“Ya es una cuestión común periódica, y cada vez que pasa se dice, ah, una más.Las mujeres no somos cifras.”

La activista subraya que, se debe hacer por erradicar una violencia de género que tiene sus orígenes en otros estratos como la salud, la educación, en un más determinado trabajo con los hombres sobre lo referente a la sensibilización en temas de género.

“No solo una acción focalizada de las autoridades para decirnos a las mujeres el cuidar a dónde vas o el cuida como te vistes.”

Sobre otro tipo de violencia, la que se da soterrada por la inacción de candidatas y candidatos que se postulan a puestos de elección popular, sin estar dispuestos a atender realmente las necesidades y trabajar en favor de los derechos de las mujeres, Aldaz consideró:

“Generalmente cuando se dan las coyunturas y se conciertan las alianzas entre partidos políticos cuya visión es totalmente distinta, lo primero que se arroja al último escalón y se invisibiliza son los derechos de las mujeres.”

“Las o los que lleguen a la legislatura, deben realmente atender cuestiones que tienen que ver con nuestros derechos, que atiendan realmente nuestra salud. Nuestros derechos sexuales y reproductivos son fundamentalmente derechos humanos”.

Morales señaló que, está terminando una legislatura, a punto de iniciar una nueva y que no ha habido ningún avance en los derechos de las mujeres en este país.

“Hay mucha violencia, sigue habiendo abortos clandestinos, las mujeres no tenemos las facilidades para decidir sobre nuestro cuerpo, sobre nuestra vida.”

“Ya estamos cansadas de que no se nos haga caso y se nos sigan vulnerando nuestros derechos, que den prioridad a otras situaciones, pareciendo que las mujeres y las y los jóvenes adolescentes no tenemos cabida en las políticas públicas.

Aldaz comenta que, tan solo hasta la semana pasada había habido nueve defunciones por mortalidad materna, lo que ubica a Oaxaca en los primeros lugares de la tabla a nivel nacional.

Además de que anualmente se reportan 20 000 embarazos en niñas menores de 19 años, con la mitad de las mujeres adolescentes que tienen relaciones sexuales, quedando embarazadas, donde más del ochenta por ciento de ellas tienen acceso a la información que en teoría les permitiría evitarlo.

“Pero no la utilizan. Habría que ver la calidad de información que se está brindando, si es acorde al hecho de que Oaxaca es un estado plurietnico, pluricultural, donde todos los contextos son diferentes y las necesidades distintas.”

“Si se está traduciendo la información a las lenguas , si se está entendiendo esa información, la manera en cómo está llegando.”

Aldaz apunta a una educación integral, donde no solo servicios de salud, sector educativo y sociedad civil deban cumplir con sus tareas de prevención de embarazo adolescente, sino que el trabajo que se impulse sea eficaz y toda la información que se dé sea científica y laica.

“Porque a veces a las chicas se les habla desde la religión, y en la adolescencia hablar de prohibiciones es una invitación para realizar las cosas.”