Trece años después del suicidio de una joven estudiante en una comunidad indígena de la región cuenca del Papaloapan, la Fiscalía de Oaxaca informó sobre la detención de una mujer acusada de haber inducido a la víctima a quitarse la vida, en un caso que ahora se investiga como homicidio por inducción con perspectiva de género.
La detenida, identificada como I.J.M., fue aprehendida por agentes de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), en cumplimiento de una orden judicial. La víctima, una adolescente de 17 años que cursaba el último semestre de bachillerato, fue hallada sin vida el 1 de marzo de 2012, dentro de su domicilio en la agencia municipal de Montenegro, en Santiago Jocotepec, distrito de Choápam. Las autoridades mantienen su identidad en reserva.
De acuerdo con la indagatoria, la joven habría sido víctima de violencia psicoemocional y física sistemática, ejercida presuntamente por un miembro de su entorno cercano. Esta violencia, que según la fiscalía fue sostenida y con una fuerte carga de coerción emocional, culminó en su suicidio.
Se trata de uno de los pocos casos en Oaxaca en los que se configura legalmente la figura de homicidio por inducción.
El proceso judicial se reactivó tras años de inacción, gracias a la incorporación de perspectiva de género en la investigación, una herramienta que ha permitido a las autoridades reexaminar casos en contextos de violencia estructural o familiar.
La Fiscalía detalló que la detenida, quien es familiar de la víctima, fue puesta a disposición del juez de control para que se defina su situación legal.
