Un nuevo naufragio frente a las costas libias deja al menos 90 desaparecidos

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El País.

Ciudad de México. Unos 90 migrantes han desaparecido este viernes en aguas del Mediterráneo tras zarpar en una barcaza desde las costas de Libia, según ha informado la Organización Internacional de las Migraciones (OIM). “Hay 13 víctimas confirmadas; todavía no tenemos el número exacto de fallecidos”, explica por teléfono desde Túnez Olivia Headon, responsable del organismo para el país norteafricano. En lo que va de año, y sin contar la tragedia de este viernes, 218 personas han fallecido intentando alcanzar Europa por el Mediterráneo central, según la OIM.

Headon explica que el naufragio de este viernes ha sido “el segundo de la semana y el peor del año”, pese a que la llegada de migrantes a Italia se haya reducido de manera considerable en los últimos meses. En enero, 4.081 personas cruzaron el Mediterráneo central y desembarcaron en Italia, un 9% menos que el año anterior y una cifra un 23% más baja en comparación con 2016, según el Ministerio del Interior del país transalpino. Si se toman en cuenta solo los procedentes de Libia (3.143 en enero), el descenso es del 26% con respecto a 2016.

Esta disminución en las llegadas es el resultado de los acuerdos —criticados por ONG y organizaciones humanitarias— que la Unión Europea e Italia firmaron en 2017 con Libia, dirigidos a brindar apoyo logístico y de formación a la guardia costera del país norteafricano, que vive sumido en el caos desde la caída de Gaddafi en 2011. El pasado diciembre, Amnistía Internacional denunciaba la complicidad indirecta de la UE en el tráfico de migrantes en su informe Libya’s dark web of collusion, en el cual acusaba a los agentes de la guardia costera libia de actuar “en connivencia con redes de tráfico de seres humanos” de diferentes maneras, por ejemplo escoltando los barcos de migrantes hasta aguas internacionales previo pago de una mordida o devolviéndolos directamente a las mafias después de que hubieran sido interceptados en el mar.

Headon explica que el naufragio de este viernes ha ocurrido muy cerca de la costa, y que dos migrantes han logrado volver hasta la orilla a nado y salvarse. Otro ha sido rescatado por un pesquero. Los mismos supervivientes han informado que a bordo del barco había unas 90 personas, en su mayoría de nacionalidad paquistaní.

Según el Ministerio del Interior de Italia, 258 paquistaníes han llegado a Italia tras cruzar el Mediterráneo en lo que va de año, y se han convertido en la tercera nacionalidad con más presencia en los desembarcos por detrás de eritreos y tunecinos, que han tomado el relevo a nigerianos y guineanos.

La tragedia de este viernes se produce en una semana en la que cientos de personas habían sido rescatados en el canal de Sicilia por Médicos Sin Fronteras, y justo un día después de que finalizara la operación de vigilancia y rescate Tritón —puesta en marcha por la UE en 2014—, a partir de ahora sustituida por la operación Themis, liderada por Frontex —la agencia de control de fronteras exteriores de la UE—. Según Headon, este relevo no tiene vinculación con el naufragio. “El barco se volcó porque iba muy lleno”, asegura la portavoz de la OIM, quien añade que la situación de los migrantes en Libia sigue siendo “muy complicada”.

Este mismo viernes, la OIM ha informado de que hasta el 28 de enero llegaron a Europa 6.624 migrantes, frente a los 5.983 del mismo periodo de 2017. El 64% de ellos entró por Italia, seguida por España, con un 19%, el país donde el flujo de migrantes que arriban por mar más está aumentando, y Grecia, con un 16%.