Reforma.
Ciudad de México. La Arquidiócesis Primada de México criticó que el 2017 concluye con la captura de ex Mandatarios locales acusados de corrupción y desvío de recursos públicos.
En el editorial del semanario Desde la Fe, criticaron que en este año la corrupción y la violencia fueron los ingredientes del desastre nacional.
“El 2017 fue un año marcado por la captura de ‘célebres’ Gobernadores pertenecientes a la nueva generación de políticos, jóvenes líderes, que superaron en ambición y locura por el poder a cualquier corrupto del antiguo régimen”, puede leerse en dicho editorial.
En el escrito, afirmaron que los ex Gobernadores detenidos se beneficiaron del poder para obtener una vida extravagante, pero mantuvieron como rehenes a millones de ciudadanos de entidades pobres.
“Fraudes, desfalcos a la tesorería pública, sobornos, pagos irregulares, conflictos de interés, desvío de recursos, tráfico de influencias, licitaciones amañadas o facturas sobrevaluadas, todo fue permitido; vicios que se pasearon de la mano con la impunidad”, cita el semanario.
La Arquidiócesis recordó que, de acuerdo con el estudio “México, anatomía de la corrupción”, que realizó el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), entre 2000 y 2013 existieron 63 Gobernadores y fueron exhibidos 71 casos de corrupción por parte de 41 Mandatarios.
De éstos, sólo 16 fueron investigados y únicamente 4 encontrados culpables y procesados.
Respecto a la violencia, resaltaron que en 2017 se registró un aumento significativo en la comisión de delitos violentos.
Explicaron que de enero a noviembre se iniciaron 101 carpetas de investigación por homicidios dolosos, el número más alto en las últimas dos décadas.
Expresaron que, de acuerdo con la organización Brigadas de Paz, en México los factores que permitieron el auge del crimen organizado son la impunidad, la corrupción y las profundas desigualdades socioeconómicas.
En la publicación, también enfatizaron que la Procuraduría General de la República (PGR) está virtualmente desmantelada, acéfala y además es rehén de los partidos políticos.
Además, afirmaron que hay ausencia de acuerdos para la designación del Auditor Superior de la Federación y que existe una parcial implementación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA).
Aunado a esto, observaron una carencia de funcionarios capaces y con alto sentido de responsabilidad por el servicio público.
“El proceso electoral en vigor se ha convertido en un distractor de las cosas que realmente merecen la atención de las autoridades”, consideró la Arquidiócesis.
La Iglesia católica de la capital aseguró que no hay indicadores que muestren que la corrupción y la violencia disminuyan en el 2018.
