Al iniciar el proceso para la designación del nuevo presidente nacional del PRI, su dirigente, César Camacho, aseguró ante los consejeros priistas que “la elección interna marcha sobre rieles” y que “los ojos de la sociedad mexicana están puestos en el partido”.
Por ello, pidió a quienes compitan que lo hagan “en unidad”, con “respeto”, con el “encuentro de elementos afines que nos acerque y nos vincule, y con colaboración”.
También aclaró que la contienda debe ser “más allá de proyectos personales o grupales, todos legítimos, todos respetables”, pero subrayó que “primero está el interés superior de México, que es aquel por el que el PRI trabaja”.
Explicó que la mecánica será que este jueves, a las 12:00 horas, habrá de sesionar la Comisión de Procesos Internos para elaborar y expedir la convocatoria que se habrá de publicar, a fin de que surta efectos a partir del viernes y abrir un plazo de 10 días para esperar que digan quiénes tienen intención por ser considerados, y llegado el momento conseguir el registro correspondiente.
En este periodo los aspirantes deberán buscar y conseguir el apoyo de las organizaciones corporativas y de la estructura territorial.
De registrarse más de una fórmula, a este plazo aumenta a 20 días, con lo que la elección se resolvería en septiembre. De haber una sola y un candidato de unidad, en dos semanas estaría el nuevo presidente.
