Promueve Defensoría políticas públicas que impulsen derechos de las mujeres en municipios

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La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca realizó el jueves 5 de junio un taller para promover los derechos de las mujeres entre autoridades municipales, servidores públicos y la comunidad en general, a fin de contribuir a la disminución de la brecha de desigualdad entre hombres y mujeres.

 

La Coordinación General de Fortalecimiento a la Cultura de los Derechos Humanos informó que en este taller participaron autoridades municipales de las comunidades de la Villa de Tututepec de Melchor Ocampo, Santa Catarina Juquila, Santa Inés del Monte, Ánimas Trujano y San Pablo Huixtepec.

Expresó que la participación de estas autoridades es una oportunidad para que la Defensoría pueda incidir en las políticas públicas que apliquen estos municipios, a fin de que los derechos humanos sean un eje fundamental en sus planes de gobierno.

El taller fue diseñado para desarrollar temas como la equidad de género, el marco jurídico de los derechos de la mujer, los antecedentes de los derechos de la mujer y una revisión a detalle de cuáles son y en qué consisten estos derechos, haciendo énfasis en que las mujeres son sujetos de derecho, por lo cual hay que respetárselos.

Además de las autoridades municipales, en este taller participan personal de la Procuraduría General de Justicia, asociaciones civiles, estudiantes de derecho y público en general.

La Defensoría señaló que es importante la participación de la sociedad en general en estas actividades, ya que de esta forma se puede construir un diálogo entre los diferentes actores sociales que permita el respeto pleno de los derechos humanos.

La generación de los talleres como espacio de diálogo, es una acción estratégica para la Defensoría del Pueblo de Oaxaca, pues por medio de estas actividades el organismo ha detectado la existencia de barreras, prejuicios y estereotipos que no permiten el goce pleno de los derechos de las mujeres.

Un ejemplo de estos rezagos culturales es la idea de que las decisiones de las mujeres respecto a sus cuerpos, sexualidad y reproducción deben estar sujetas a la aprobación de su pareja.

Otro aspecto de este rezago es el lenguaje sexista, el cual refleja las desigualdades que afrontan las mujeres en forma cotidiana, ya sea para tener condiciones laborales iguales a las de los hombres, o bien, acceso pleno a la justicia sin que se responsabilice a las mujeres que son víctimas (por ejemplo, de alguna agresión sexual).

La Defensoría enfatiza que debido a estos rezagos culturales, es relevante visibilizar este tipo de situaciones que no sólo afectan a las mujeres, sino que no permiten el desarrollo social integral.