La DDHPO debe emitir ya su recomendación sobre autoridades de Tanivet: Villalobos Rueda

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“¿Esas mujeres que mas quieren? son unas huevonas, piojosas. Le conozco los calzones a cada una de ellas”.

Estas fueron las palabras que Rosario Villalobos Rueda, coordinadora de la Asociación Civil Mujeres Unidas en torno al Género, la Equidad y la Reivindicación, refiere haber escuchado de Baldemar Pérez Canseco, subsecretario de Prevención y Reinserción Social de la Secretaría de Seguridad Pública.

En entrevista, Villalobos, abogada y subsecretaria de derechos humanos en la anterior gubernatura, cuenta que esa fue la respuesta que recibió del subsecretario, cuando trató con él las quejas que sobre su situación y sus deseos de ser trasladadas de reclusorio le expresaron las internas del penal femenil Tanivet hace unos meses y cuya desatención según Villalobos Rueda, dio como resultado el motín del 14 de febrero y la crisis de derechos humanos, que actualmente se vive hacia el interior del penal.

“Se quejaban de que les pedían cuotas semanales, de que las revisiones a las visitas eran cada vez más crudas, que no había medicas o médicos, que en cada operativo las desnudaban y las golpeaban”.

Refiere la abogada y menciona que en su reunión con Pérez Canseco, previa al amotinamiento de las reclusas este comentó que estas “eran unas malagradecidas, pues a su esposa que vendía en la tiendita la terminaron corriendo”.

Villalobos refiere que, le comentó entonces al subsecretario sobre las cuatro mujeres del penal que habían logrado ser trasladadas mediante un amparo al penal de Tehuantepec. “Pues les voy a hablar al juez para que me la regrese” fue la respuesta que la abogada recuerda haber recibido.

La coordinadora también refiere a la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) como otro organismo que, no actuó a tiempo en el caso del penal de Tanivet, frente a las quejas que se suscitaron sobre malos tratos de celadoras, comida en pésimas condiciones y un agua salada que permea hacia el penal (consecuencia del brazo de mar existente en Tanivet) con la que se bañan y se asean, la cual ha dado por resultado una presencia de enfermedades cutáneas en las reclusas.

“La defensoría nos tendría que decir cuántas quejas sobre este tema tenía en su haber, antes de que finalmente estallara”.

Villalobos comenta, la asociación que representa, inició desde el cuatro de agosto la solicitud para el traslado a Tehuantepec de algunas reclusas del penal que, gestionaron y triangularon a través de la Defensoría, las quejas que sobre Tanivet habían hecho de su conocimiento y que ella personalmente habló con el visitador Juan Rodríguez Ramos haciendole ver que, si la Defensoría no hacía caso de las demandas las mujeres estas se amotinarían.

Sobre un penal, Tanivet con poco menos de 18 años de existencia, Villalobos precias que, sus irregularidades corresponde por supuesto con las que se presentan en los penales de todo el país en donde no se cubren las condiciones que se necesitan para una vida digna de sus internos.

Sobre la recién nombrada nueva directora del mismo Ángela Torres, originaria de Sinaloa y quien laboró anteriormente en un penal de Quintana Roo, Villalobos refiere que, su actitud de prepotencia fue “la gota que derramo el vaso”.

“Le exigía a las internas que para dirigirse con ella pusieran sus manos detrás y le hicieran una reverencia “menciona Villalobos, recuerda que el comentario de Pérez Canseco sobre esta actitud fue que estas eran disposiciones que había que seguir para llevar al penal a niveles de excelencia.

Para el 14 de febrero, la abogada refiere que las 155 internas del fuero común ya se habían decidido a no asistir al pase de lista, y que especificaron que no hablarían con Pérez Canseco. “No realizaron huelga de hambre porque algunas de ellas tienen ya una salud deteriorada. Se les están cayendo los dientes. Están descalcificadas”.

“Llega Arturo Peimbert (Defensor de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca) a las doce del día y Pérez Canseco lo quema con la internas saludándolo y llamándolo amigo. Las internas no quieren hablar con él.

Villalobos refiere que, a su llegada Peimbert es intimidado por la directora, este le pregunta sobre su lugar de origen, ella le contesta que eso no le importa y acto seguido las custodias empiezan a tomarle fotos al defensor.

Las reclusas insisten en que no se meterán a sus celdas. El defensor se va del penal y en ese momento, relata Villalobos, entra un operativo policiaco donde son golpeadas las 155 mujeres amotinadas, metiendo en aislamiento inmediato a las seis que mas hablaron.

“Las separaron y las aislaron. Las desnudaron, las golpearon a macanazos y les acercaron perros a sus genitales. Después les quitaron el comedor y estuvieron comiendo en el piso”.

Los nombres de estas seis mujeres son: Verónica Natalia Mina Cabrera, Mariana Paulina López Rodríguez, Marisol García Renteria, Azalia López de la Cruz, Elsa Martínez Martínez (quien presenta una lesión que le requiere el uso de un collarín) y Araceli Ramírez Crisostomo, quienes actualmente ya se encuentra de regreso con la población general del penal.

Sobre la Defensoría y Arturo Peimbert, Villalobos reconoce que, “se tardaron, pero que están haciendo el trabajo que les corresponde”.

“La recomendación de la defensoría tiene que ser ya, no puede esperarse un mes para hacerlo. Como defensor de derechos humanos, tú no puedes ser un burócrata. No puedes decir espérame, voy por la a para llegar a la z”.

Villalobos considera, “Peimbert debe sugerir al gobernador la separación de su cargo de la directora Ángela Torres y el subsecretario Baldemar Pérez Canseco, para llevar a cabo las pesquisas de su recomendación”.

“Tiene que hacer la recomendación ya y dar los resultados que le arrojo la aplicación del protocolo de Estambul (manual de la ONU para detectar casos de posible tortura)”.

La abogada, quien cuenta que también hay ya medidas cautelares de la Defensoría, para la protección de la integridad de ella y de las mujeres que laboran en la asociación que coordina, cuenta que por su parte la reclusas de Tanivet piden la salida de Torres, Pérez Canseco, “y el turno”, es decir todas las personas que participaron en los malos tratos acontecidos en Tanivet desde el 14 de febrero.