La caída en la recaudación de ingresos del Gobierno Federal vía impuestos en febrero de 2014, por alrededor de 130 mil 24 millones de pesos, se debe a la falta de confianza de la gente en el Gobierno de Enrique Peña Nieto, señaló el senador Benjamín Robles Montoya.
“Los números son para poner nerviosos sobre todo a los ciudadanos, pues cuando el Gobierno no cumple las metas de recaudación de impuestos, son los ciudadanos quienes terminamos pagando los platos rotos. Es un círculo vicioso el que ocasiona el mal accionar del gobierno, pues al administrar mal, la gente se da cuenta y deja de otorgarle ingresos, y eso ocasiona que el estado no tenga recursos para cumplir sus metas y deba hacer recortes”, asentó.
Y es que, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público divulgó en un informe retomado por diversos medios, que los ingresos tributarios en febrero de 2014, en relación con el mismo mes del año pasado, cayeron 9.4 por ciento en término reales, lo que eventualmente equivale a más de 130 mil 24 millones de pesos.
“La gente mexicana no confía en que el gobierno gaste bien su dinero, por eso no sorprende que la recaudación esté a la baja”, reiteró el secretario de la Comisión de Fomento Económico del Senado de la República.
Dijo que nadie puede negar una realidad que va más allá de los números, y es la percepción de que el país no se mueve.
“México solo se mueve en los spots y en los noticieros de la televisión, pero en la vida real existe una percepción de estancamiento, inclusive de retroceso”, reprochó.
Robles Montoya recordó que diversas universidades han efectuado estudios que explican claramente la relación entre la percepción de un sistema fiscal injusto y la evasión o el incumplimiento de las obligaciones fiscales. Datos recientes encargados por el propio Servicio de Administración Tributaria a la Universidad Panamericana y que se han hecho públicos, dan cuenta de ello, argumentó,
“Cuando una persona no percibe que el pago que realiza le regresa beneficios, lo cual es justo, entonces hace lo imposible por dejar de cumplir. Es natural y completamente explicable”, describió.
Por esa razón, propuso la inmediata formación de un paquete de medidas que fortalezcan la rendición de cuentas del Gobierno Federal y la transparencia en la administración de sus programas. Lo anterior, dijo, para que la ciudadanía tenga la certeza de que sus recursos se están destinando a los objetivos previstos.
“Hay que defender la rendición de cuentas y la transparencia hasta sus últimas consecuencias. La gente necesita que el gobierno tenga paredes de cristal y debe tenerlas. Cuando eso pase, estoy seguro que la recaudación será mucho más generosa”, concluyó.
