Al parecer a los dueños de los parques eólicos se les olvidó el apoyo que les prometieron a campesinos de la región del Istmo.
Ahora bien o mal ya se encuentran instalados en tierras istmeñas y ni quien los haga cumplir con lo que le prometieron a los propietarios.
Está situación pasa afectar a las demás empresas que quieren instalarse, pues los comuneros ya dijeron que no permitirán más engaños.