Alfredo Martínez de Aguilar
En política no hay casualidades, sino causalidades. Y a la luz de los hechos de brutal violencia que provocan la orgía de sangre, esta deja entrever que, en realidad, se trata de un plan preconcebido.
Se trata finalmente, a querer o no, guste o no, de acciones concertadas de la delincuencia organizada con una alta carga de accionar político a lo largo y ancho del territorio nacional.
El objetivo de que aparezcan cadáveres desmembrados en refrigeradores es sembrar terror antes y durante del proceso electoral que inicia formalmente el próximo viernes primero de septiembre.
La creciente inseguridad y violencia no es más que el caldo de cultivo para tratar de desactivar la participación ciudadana e inhibir el voto masivo opositor en la elección presidencial de 2024.
De tal manera que, en un ejercicio de creación de escenarios políticos futuros, no es nada descartable que ante la probable derrota de su candidato, Morena desconozca los resultados.
La Fiscalía General del Estado de Veracruz informó que al menos 13 cuerpos desmembrados, embalados y congelados fueron encontraron en dos casas de grupos criminales en Poza Rica.
La misma genialmente perversa estrategia de detonar la creciente violencia en Veracruz se replica en Jalisco, donde desaparecieron cinco jóvenes que bien pudieron ser nuestros hijos o nietos.
En un video enviado a los familiares aparecen los jóvenes golpeados, amordazados. La grabación muestra a los jóvenes siendo obligados a hacerse daño entre ellos, usando piedras y un cuchillo.
Pero la cada vez más brutal violencia se hace extensiva a la delincuencia común que provocó, por ejemplo, la muerte de un niño de 4 años, presuntamente golpeado por su padrastro «El Pulga».
Juan Carlos C., alias “El Pulga”, padrastro del hijo de su pareja, fue detenido por su probable asesinato al interior de su domicilio en la agencia de Pueblo Nuevo, en la capital oaxaqueña.
“El Pulga” llevó al menor a la farmacia Similares y pretextó que en la madrugada habían sido asaltados y golpeados, sin embargo, la madre del niño negó tal versión, por lo que fue detenido.
La violencia generalizada alcanza cotas inimaginables. David Melgoza Montañez, alcalde de Tangancícuaro, Michoacán, mató a balazos a dos perros, lo cual quedó grabado por una cámara de vigilancia.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos y la Fiscalía de Michoacán iniciaron una investigación por el delito de crueldad animal con el agravante que, en los videos se percibe a Melgoza borracho.
Médico Cirujano de la Escuela Médico Militar con la especialidad en Cirugía General por parte de la Universidad del Ejército y Fuerza Aérea, el alcalde michoacano deja muy mal parado al Ejército.
Melgoza Montañez ha recibido severas críticas en redes sociales tras descubrirse que habría matado a Buba y Canela (dos perros de raza, Labrador Retriever y Pastor Belga, respectivamente).
Un día después, durante su segundo informe, fue recibido por la gente con abucheos y gritos de repudio tales como…”¡El pueblo no te quiere!, ¡Asesino!, ¡Que renuncie!, ¡Fuera el presidente!”.
Ello, llevó al partido político de donde emanó, Morena, a declarar la “conducta personal y política” de este como “…condenable y… de rechazo por parte de la gente que busca erradicar la violencia”
La condena popular obligó, al mismo tiempo, al Gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, a su deslinde, pues “en Michoacán condenan el maltrato y la crueldad hacia los animales”.
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