60 años de bomberos (no tatuados) en Oaxaca

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En 1954, el entonces gobernador oaxaqueño, general Manuel Carrera Carrasquedo ordena, después de que un desastroso incendio acabara con un almacén comercial del centro de la ciudad, ordenó que seis policías pasaran a formar una brigada de bomberos .

Sin personal calificado, sin equipo, con un camión Willis adaptado como autobomba y comprado en Estados Unidos (el único camión que el gobierno del estado ha comprado durante los sesenta años de existencia del cuerpo) es como da inició el Heroico Cuerpo de Bomberos del Estado de Oaxaca.

Poco más de seis décadas después, con su director Manuel Maza Sánchez con 16 años al frente de su administración, los bomberos oaxaqueños se encuentran ya en la profesionalización irremediable. Con modernos vehículos de combate de siete u ocho millones pesos adquiridos en donación mediante un convenio de hermanamiento con el Comité de Ciudades Hermanas de Palo Alto, California.

Oaxaca (con tres estaciones) Puerto Escondido, Tuxtepec y Juchitán son los sitios donde los bomberos dependientes de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal existentes en el estado (las otras dos estaciones que figuran en Huajuapan y Santa María Huatulco pertenecen a un orden municipal).

“El servicio sin miramientos políticos, sociales o religiosos” es lo que define Maza Sánchez como eje fundamental del servicio de apagafuegos .

“Hemos ido abriendo un abanico de servicios, no solamente se atienden incendios sino que se ofrecen servicios de atención pos hospitalaria con las ambulancias. Labores de rescate, salvavidas en Zicatela, personal para rescate acuático, subacuático, para espacios confinados y desniveles”.

Maza asegura que la intención es seguir capacitando al personal, “muchas veces se nos presentan casos que nunca hemos visto y en esos momentos tenemos que actuar con lo que sabemos y con lo que tenemos y hacerlo de la mejor manera para poder salvar vidas o patrimonios”.

El director explica además que los vehículos automotores cada año salen con componentes diferentes que no se deben combatir con agua, como el antimonio.

“Si un vehículo primera generación se incendia en la ciudad y alguien si saber arroja agua al vehículo, puede provocar una explosión e incluso la muerte”.

Este 19 y 20 de enero la Asociación Mexicana de Recargadores de Extintores dará un curso a los bomberos y a empresarios hoteleros y sus jefes de seguridad para alertar sobre que nuevos materiales existen en el tema.

“Como están los polvos químicos, las espumas , el gel , las emulsiones para combatir determinados tipos de incendios , pues hay del tipo que no se deben combatir con agua”.

Maza cuenta que la idea es alertar y que los interesados sepan para que se usan y que es lo que contienen los extintores. Previniéndolos además sobre aquellos representantes de falsas compañías que ofrecen llevarse sus extintores para checarlos, pero que se los regresan por otros de pésima categoría, y aquellos otros que se ofrecen a rellenar los extintores a mitad de precio y los terminan rellenando con talco o harina.

190 elementos, 25 vehículos, entre autobombas, camiones de rescate, vehículos ligeros, y de ataque rápido, además de jets skis , cuatrimotos , balsas y lanchas, es el inventario humano y material con el que cuenta el cuerpo estatal de bomberos.

“Todos los elementos cuentan con un seguro de vida por muerte en servicio que llega al medio millón de pesos. Y en caso de un accidente en el trabajo se les respeta su incapacidad”.

Respecto a porque las cuatro mujeres del Cuerpo se desempañan en áreas administrativas y de comunicaciones, y no en el área operativa, Maza asegura.

“Son muy pocas las que vienen a darse de alta como tal. Pero si se presenta un operativo y se requiere de su presencia, ellas están perfectamente capacitadas. Se suben y se van”.

Hay incendios de material combustible ligero, pastos, arbustos, carrizos y demás Incendios provocados por materiales químicos peligrosos.

De noviembre hasta mayo, se registran por cuestiones climáticas una gran cantidad de incendios de pastizales semiforestales, en Oaxaca. Razón por la cual la labor del bombero se multiplica.

“En Oaxaca hay muchas zonas de transición, zonas donde terminan las casas y empiezan los terrenos baldíos. Casas aisladas, que pueden llegar ser presa fácil de un siniestro”.

Maza acude al uso del mero sentido común para la prevención de incendios e identifuica la pirotecnia desatada de los últimos y los primeros días del año, como un dolor de cabeza para su corporación.

El director reporta que en diciembre hubo tres o cuatro niños en Oaxaca internados en hospitales por graves quemaduras . Además de dos casos de siniestros en casa habitación.

Cuatro niños en Santa Rosa Panzacola que se pusieron echarse cuetes y que para cuando regresaron sus padres ya se había quemado toda la casa. Y otros dos niños que en algún pueblo de la Costa quemaron sus sillones con cohetones y terminaron incendiándolo todo. En ambos casos los bomberos llegaron a tiempo y no hubo víctimas mortales que lamentar.

Cuando se le pregunta finalmente a Maza sobre los pasos a seguir para aquel joven oaxaqueño que piense tener con él la vocación de bombero, el director indica que deben presentarse con sus papeles a las oficinas de la corporación, aunque eso sí, “no se aceptan tatuados ni gente con adicciones”.

“Un tatuaje dentro de la corporación puede representar un desequilibrio emocional .Como bomberos no es una situación recomendable. Preferimos que el personal sea gente sana y equilibrada mentalmente”.

Manuel Maza Sánchez se mantiene ecuánime en su prejuicio, al frente de una corporación emblemática y familiarizada con una sociedad entera.