Incorporación fiscal, la apuesta del SAT

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El Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) es la gran apuesta del Estado mexicano contra la informalidad, pero en él no tienen cabida quienes desempeñan actividades económicas ilegales, advirtió el jefe del Servicio de Administración Tributaria, Aristóteles Núñez Sánchez.

Advirtió que quienes venden robado, piratería y contrabando serán sujetos al tratamiento que marca la ley para esos casos, y amagó con auditar y sancionar a los que intenten utilizar el RIF como un mecanismo para tratar de engañar a la autoridad fiscal.

En un discurso pronunciado en la Jornada Sobre la Reforma Hacendaria en Mérida, Yucatán, para explicar qué y para quién es el RIF, cómo funciona y los beneficios, dijo que el Estado ayudará a los incorporados a adherirse y cumplir con sus obligaciones.

Al respecto, explicó que los tres niveles de gobierno, es decir, federal, estatal y municipal, tienen la obligación de poner a disposición de los contribuyentes sus oficinas, equipo de cómputo, internet y asesoría, para que reporten al SAT ingresos y gastos.

Incluso, indicó, a quienes viven en comunidades rurales apartadas, donde no existen computadoras ni internet, se les darán todas las facilidades para que puedan reportar dichos ingreso y gastos a través de una llamada telefónica.

Exentos

Aclaró que los incorporados están exentos del pago de impuestos en el primer año de incorporación al RIF, y que no tienen qué emitir factura electrónica por todas y cada una de las ventas que realicen al público en general, sino solamente una bimestral, en el que engloben el total de dichas ventas.

Refirió que a menudo se dice que el SAT tiene más facultades, que es más duro y realiza más auditorías a los contribuyentes. Sin embargo, dijo, éste no es el caso de quienes forman parte del RIF, sólo de aquellos que intenten usarlo para burlar a la autoridad.

Durante su exposición, explicó que el RIF es la gran apuesta del Estado mexicano contra la informalidad, porque a través de él se abrirá la posibilidad de que los 29.6 millones de mexicanos que realizan actividades económicas lícitas en ese sector tengan acceso a los beneficios de la seguridad social.

“El primer paso para migrar a la formalidad es haber decidido desempeñar una actividad económica lícita. Aquí no cabe el que vende robado, contrabando o piratería. Para ellos las leyes ofrecen otro tratamiento y hay que aplicarlo”, advirtió.

El funcionario sostuvo que a los incorporados no se les realizarán auditorías por el momento, sólo a aquellos que intenten utilizar el RIF para burlar a la autoridad.

El jefe del SAT estuvo acompañado por la procuradora de la defensa del Contribuyente, Diana Bernal, quien respaldó el RIF y manifestó el interés de la Prodecon para que dicho régimen sea más incluyente, es decir, que se abra a contribuyentes para los que ahora está cerrado.