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La iniciativa privada mantiene el interés de poder intervenir con inversión para concluir el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) que se estaba construyendo en Texcoco y que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador canceló.
No se trata de una o dos empresas interesadas en el rescate del proyecto de infraestructura más ambicioso del gobierno de Enrique Peña Nieto, sino de decenas de ellas y organismos empresariales, aseguro Gustavo de Hoyos Walter, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El líder patronal es un de los impulsores de del colectivo conocido como #NoMásDerroches encabezado por el organismo Mexicanos Contra la Corrupción que presentaron una serie de amparos busca detener la adaptación de la base aérea militar en Santa Lucia, en un aeropuerto comercial que opere junto con el de la Ciudad de México y el de Toluca.
El objetivo de este grupo es evitar el “despilfarro” de recursos públicos en la integración de este proyecto.
“Iniciar el proyecto (del aeropuerto de Santa Lucia) es un despilfarro lo que se está gestando, que se haga una valoración con todos los elementos que tiene a su alcance para que tal como lo prometió Andrés Manuel López Obrador a la Coparmex en marzo de 2018, el proyecto de Texcoco pueda concluirse con inversión privada”, aseguró el empresario durante la celebración de los 90 años del organismo.
Este viernes el Juzgado 4 de Distrito en Materia Administrativa si revocara o no las suspensiones definitivas otorgadas en contra de la construcción de esta base aérea.
