A falta de militancia nueva y convencida, sin la base social de antaño ni de sus líderes más recientes, el Partido Revolucionario Institucional de Oaxaca (@PRIOaxaca_ ) inició su campaña de afiliación utilizando empleados del CDE.
En fotografías para redes sociales y medios de comunicación, es notoria la falta de militancia que acuda a la reafiliación o la afiliación en caso de ser nuevos en el partido.
Utilizando el ahora gigantesco auditorio del PRI, al que no pueden llenar, la líder estatal del PRI, María del Carmen Ricardez Vela (@CarmelitaRicdzV empezó la fase estatal de la campaña nacional de afiliación con empleados de las áreas de Transparencia, Presidencia, Finanzas, Intendencia y algunos del comité municipal y secretarios del tricolor.
Camino a su desaparición, el Partido Revolucionario Institucional (@PRI_Nacional) puso en marcha la fase estatal de su afiliación 2025, en un evento que contrastó con los tiempos de las grandes concentraciones priistas.
Esta vez, sin masas ni acarreados, el arranque apenas reunió a empleados y muy escasa militancia.
El acto estuvo encabezado por la líder estatal, María del Carmen Ricárdez Vela. Como primer afiliado se registró Hugo Jarquín, dirigente municipal del PRI en Oaxaca de Juárez.
El tricolor vive una etapa de desaparición inminente en Oaxaca, tras perder espacios de poder y presencia social, mientras intenta recuperar terreno con estrategias que lucen más simbólicas que reales.
El nulo trabajo político de los Secretarios del CDE junto a su bajo arrastre social y la rapiña de las prerrogativas del partido por parte de la dirigente estatal, María del Carmen Ricardez Vela, llevan al Revolucionario Institucional a su extinción.
Solo viven para apoderarse de los 20 millones 272 mil pesos que durante el 2025 recibe el PRI de prerrogativas, es decir 1 millón 700 mil pesos en promedio mensuales.
Administrar la decadencia política y social del Revolucionario Institucional pasa a segundo término. El negocio es la rapiña del dinero público.
PRI Oaxaca
Carmelita Ricardez
