La Dirección General del Colegio de Bachilleres del Estado de Oaxaca (COBAO) enfrenta una nueva crisis. En el arranque oficial de clases, trabajadores del Plantel 01 Pueblo Nuevo, afiliados al Sindicato Único de Trabajadores del COBAO (STUCOBAO), tomaron las instalaciones para denunciar presuntos actos de corrupción, abuso de poder y prácticas de nepotismo dentro de la institución.
Los manifestantes exigen la destitución de Víctor López San Germán, director administrativo y financiero del sistema educativo, así como de María Juana Esquivel, responsable de Recursos Humanos. De acuerdo con los trabajadores inconformes, el COBAO se ha convertido en una red de privilegios y favores personales al amparo de la dirección general, encabezada por Angélica García Pérez, cuya gestión consideran ineficaz y alejada del compromiso institucional.
“Le quedó grande el cargo”, expresaron públicamente los empleados del plantel, quienes aseguran que el gobierno estatal reiteró, durante campaña, el compromiso de erradicar la corrupción, pero hoy —denuncian— el COBAO se ha convertido en “la Cueva de Alí Babá y los cuarenta ladrones”.
La protesta de este lunes pone en jaque una institución que durante años fue símbolo de orgullo para los oaxaqueños. El descontento también alcanza al entorno del gobernador, al que acusan de rodearse de una élite de funcionarios que se reparten el poder en lugar de atender las necesidades del sistema educativo público.
En medio del paro, los trabajadores exigieron la intervención inmediata de las autoridades federales y estatales de educación, incluyendo a la próxima presidenta Claudia Sheinbaum y a la SEP, para frenar los abusos y garantizar un proceso de saneamiento institucional.
Mientras la dirección del COBAO guarda silencio, la inconformidad de la base trabajadora crece y amenaza con extenderse a otros planteles del estado si no se atienden las denuncias.
