Como ya es costumbre, la dirigencia del sección 22 del magisterio oaxaqueño determinó presionar para obligar a derogar las reformas educativas del 2015, sin descartar boicot a las festividades de la Guelaguetza 2023, a pesar de que ambos casos no le asiste la razón, por las respuestas previas recibidas a sus planteamientos.
En asamblea estatal de gremio, y aplicando su conocidas táctica Movilización-Negociación-Movilización, los maestros definieron el inicio del paro de labores inmediato en la entidad.
Determinaron que será a partir del 1 de septiembre, fecha en que reanuda el periodo ordinario de sesiones del Poder Legislativo federal, y al que buscan presionar derogar reformas educativas del año 2015, que en discurso el gobierno federal ya ha aceptado que se eliminen.
Una de las decisiones sin fundamento del magisterio es la amenaza de boicotear las festividades de la Guelaguetza 2023, cuyo primer Lunes del Cerro es el próximo 17 de julio.
La voracidad magisterial no tiene límite a pesar de que recientemente doblegó a los gobiernos estatal y federal con la liberación de más de mil 600 plazas de docente para normalistas, además de que fueron descongeladas las cuentas del ex dirigente Rubén Núñez Ginez.
