Miles de mujeres de los 3 poderes se sumaron a Un día sin nosotras

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La Jornada

Miles de trabajadoras de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la Ciudad de México se sumaron al paro de mujeres Un día sin nosotras y no se presentaron a laborar en las distintas oficinas gubernamentales, salvo en la Fiscalía General de Justicia, donde empleadas aseguraron que sus superiores les condicionaron descontarles el día o reponerlo el fin de semana.

El gobierno capitalino informó que 40 por ciento de las 150 mil empleadas que laboran en la administración central participó en el paro, aunque las secretarías de Movilidad y de Inclusión y Bienestar Social reportaron que entre 50 y 70 por ciento de su personal femenino no se presentó en sus puestos de trabajo. En la de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) llegó a 98 por ciento la ausencia de trabajadoras.

En el caso de las titulares de las dependencias, se informó que la mayoría se presentó a laborar, con excepción de la secretaria de Salud, Oliva López Arellano, quien se sumó al paro, señaló el área de prensa de la institución, que agregó que la funcionaria no programa ninguna actividad pública ni reuniones de trabajo para este lunes (ayer).

También se informó que las titulares de Seduvi, Ileana Villalobos Estrada, y de Medio Ambiente, Marina Robles García, también se sumaron al paro, aunque estuvieron al pendiente de los asuntos de sus secretarías.

En las distintas dependencias se informó que el paro no afectó los servicios gubernamentales y que todos los módulos y centros de atención al público dieron servicio con varones, en algunos casos con un incremento en el tiempo para realizar los trámites, aunque otros aseguraron que no hubo mayor afectación porque también hubo una disminución de usuarios.

En el Poder Judicial se reportó que alrededor de 90 por ciento de las trabajadoras, principalmente administrativas, se sumaron al movimiento Un día sin nosotras, luego de que el Consejo de la Judicatura informó que podrían hacerlo sin perjuicio, menoscabo o afectación en su esfera laboral.

Caso contrario ocurrió en la Fiscalía General de Justicia, donde fueron pocas las que no fueron a trabajar, ante la advertencia de sus jefes de descontarles el día, reponerlo el fin de semana o alguna otra represalia, que pudiera llevarnos a perder el empleo, dijeron entrevistadas que pidieron el anonimato.

Los cambios, ajustes y recortes, comentaron, están a la orden del día, con el cambio a fiscalía, y no podemos darnos el lujo de que nos corran, cuando somos madres solteras o cabezas de familia.

En la Comisión de Derechos Humanos capitalina también la mayoría de las empleadas se presentó a trabajar, al señalar que es la mejor forma para lograr un cambio y erradicar la violencia hacia las mujeres y niñas, señalaron.

En el Congreso local, apenas cuatro mujeres fueron visibles en las tres sedes del órgano legislativo, cuyos pasillos lucieron vacíos. Viridiana Castillo, trabajadora sindicalizada, fue la única mujer en la oficina de comunicación social que acudió a trabajar en solidaridad, dijo, con las mujeres que no pudieron participar en el paro de labores, como operadoras en gasolineras y trabajadoras informales.

En la sede de Zócalo, entre las oficinas de los diputados sólo hubo hombres y se vio a tres mujeres del equipo del legislador Nazario Norberto, quienes señalaron que a nosotros nos dieron todas las facilidades, pero también somos responsables porque mañana (hoy) hay sesión, entonces hay que tener todo listo, dijo Stephanie Mendoza.

En tanto, Lucero San Juan, policía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, denunció en su cuenta de Facebook que las feministas me quemaron el día de ayer (domingo) y yo sólo deseo poder sanar y que por su dichosa lucha la cara no me quede marcada; y lamentó que no se den cuenta de que atrás de un uniforme hay también una mujer.