El VIH es hoy una infección crónica gracias a que se han logrado grandes avances en los tratamientos, pero para que éstos funcionen es indispensable la adherencia a ellos. Así lo afirmó el doctor Jay Grobler, cuya aportación científica fue esencial en el desarrollo de los inhibidores de la integrasa, la última clase de medicamentos contra el VIH en ser autorizada hasta ahora.
Grobler, quien funge como director de Biología en Enfermedades Infecciosas de la empresa MSD –donde ha trabajado durante los últimos 18 años–, está de visita en México, en el marco del trigésimo aniversario de esta empresa en la investigación de los tratamientos contra la infección.
El experto recordó que investigaciones recientes muestran que la morbilidad y la mortalidad por VIH disminuyen considerablemente cuanto más pronto se inicie el tratamiento antirretroviral, aunque reconoció que “todavía nos falta mucho por aprender sobre cuáles son las consecuencias a largo plazo de tomar estos fármacos”.
Así, dado que los medicamentos han mostrado ser tan eficientes que las personas que tienen la infección podrían estar tomándolos durante décadas, Grobler subrayó la importancia de desarrollar fármacos que demuestren ser seguros y tolerables a largo plazo. “Necesitamos que sea lo más fácil posible (tomar los medicamentos) para que los pacientes se adhieran al tratamiento, pues la adherencia se traduce directamente en efectividad”.
Otra de las preocupaciones actuales acerca de la epidemia es que las personas afectadas han comenzado a llegar a la edad madura, por lo que quienes están en la quinta década de vida o más “también están tomando medicinas para otras cosas, entonces las interacciones medicamentosas son un tema al que estamos prestando mucha atención”.
Cuestionado por esta agencia acerca de su opinión sobre la profilaxis pre exposición (PrEP), un tratamiento antirretroviral que se suministra a personas sanas que están en riesgo de contraer la infección debido a diversas prácticas, Jay Grobler consideró que “la PrEP va a ser esencial para poder controlar la epidemia”, e hizo énfasis en que este tipo de esquemas también requiere de la adherencia para poder ser efectivo. “Con la PrEP se ha hecho un trabajo muy importante y sabemos que cuando los fármacos se usan correctamente, funcionan”, aseveró.
Responsabilidad social
La farmacéutica MSD firmó este año un convenio con el Medicines Patent Pool, una organización que busca contribuir a facilitar el acceso de más personas al tratamiento antirretroviral. Mediante el acuerdo, la empresa liberó la licencia de su medicamento inhibidor de la integrasa, raltegravir, para que compañías de fármacos genéricos puedan producir versiones pediátricas para niños y niñas entre 4 meses y 12 años de edad que viven en países de ingresos medio y bajo.
