La Jornada.
Ciudad de México. El Instituto Nacional Electoral (INE) transferirá a la Tesorería de la Federación 115 millones de pesos y solicitará a las autoridades hacendarias que destinen estos recursos como apoyo a los damnificados de los pasados sismos del 7 y 19 de septiembre.
Esta cantidad proviene de que el INE canceló la compra de plantas de emergencia y arrendó las mismas y el proyecto de la auditoría del Sistema de Voto Electrónico por Internet para los Mexicanos Residentes en el Extranjero y otras economías como la cancelación del pago de celulares a consejeros.
Durante la sesión de la Junta General Ejecutiva, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, subrayó que en un momento complicado, esta es una muestra de solidaridad con la sociedad.
“Ante esta circunstancia, a pesar de que enfrentamos presiones de gastos derivadas de elecciones extraordinarias que se encuentran en curso, hoy tomamos la determinación de reintegrar de manera anticipada lo que ha sido producto de las medidas de austeridad implementadas”, señaló.
También se aprobaron medidas de excepcionalidad e instrucciones de carácter temporal para llevar a cabo la atención de 64 inmuebles que albergan oficinas e instalaciones del INE y Juntas Locales o Distritales en la Ciudad de México y los Estados de Chiapas, México, Morelos, Oaxaca, Puebla y Tlaxcala, que se vieron afectadas por los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017.
Con ese fin se arrendarán inmuebles que cuenten con el dictamen de seguridad estructural emitido por Protección Civil de la entidad, delegación o municipio correspondiente, a fin de garantizar no sólo la seguridad del personal, sino de la ciudadanía en general.
Asimismo, se cancelarán los contratos de arrendamiento de los inmuebles afectados por los sismos en estas entidades.
